Tan emocionante como es recibir opciones sobre acciones de su empleador como una forma de compensación, puede ser igualmente confuso descifrar las implicaciones fiscales que las acompañan. No tema, no necesita ser un mago financiero para entender los conceptos básicos. Aquí hay un desglose de los términos comunes y las implicaciones fiscales que vienen con las opciones sobre acciones.
¿Qué son las Opciones sobre Acciones?
Las opciones sobre acciones son un tipo de compensación que los empleadores utilizan para incentivar y recompensar a los empleados. En pocas palabras, dan a los empleados la opción de comprar acciones de la empresa a un precio predeterminado (conocido como el precio de ejercicio) dentro de un período de tiempo específico. La esperanza es que el precio de las acciones suba, permitiendo a los empleados comprar las acciones a un precio más bajo y luego venderlas con una ganancia.
Los Diferentes Tipos de Opciones sobre Acciones
Existen dos tipos de opciones sobre acciones: opciones sobre acciones no calificadas (NSOs) y opciones sobre acciones incentivadas (ISOs). Las NSOs son el tipo más común de opción sobre acciones. Generalmente se ofrecen a todos los empleados y pueden ejercerse en cualquier momento. La diferencia entre el precio de ejercicio y el valor de mercado justo de las acciones en el momento del ejercicio se grava como ingreso ordinario. Las ISOs, por otro lado, generalmente solo se ofrecen a los empleados principales y tienen un tratamiento fiscal más favorable. Para ser elegible, debe mantener las acciones durante al menos dos años después de la fecha de concesión y un año después de la fecha de ejercicio. Si cumple con estos requisitos, la diferencia entre el precio de ejercicio y el valor de mercado justo de las acciones en el momento del ejercicio se grava como una ganancia de capital a largo plazo.
El Período de Consolidación
Cuando se le conceden opciones sobre acciones, no se convierten inmediatamente en suyas. En su lugar, vienen con un calendario de consolidación que describe cuándo puede ejercer sus opciones. Este calendario generalmente se basa en el tiempo (por ejemplo, el 25% de las opciones se consolidan después de un año, el 50% después de dos años, etc.) o en objetivos específicos que la empresa pueda haber establecido (por ejemplo, alcanzar una cierta valoración o meta de ingresos). Es importante tener en cuenta que las implicaciones fiscales de ejercer sus opciones están determinadas por el período de consolidación. Si sus opciones aún no se han consolidado, entonces no puede ejercerlas y no cuentan como ingreso imponible.
Las Implicaciones Fiscales de las Opciones sobre Acciones
Ahora que hemos cubierto los conceptos básicos, hablemos de las implicaciones fiscales de las opciones sobre acciones. Como se mencionó anteriormente, la diferencia entre el precio de ejercicio y el valor de mercado justo de las acciones en el momento del ejercicio se grava como ingreso. Esto significa que si ejerce sus opciones cuando las acciones valen $50 por acción y el precio de ejercicio es $30 por acción, entonces deberá pagar impuestos sobre la diferencia de $20 por acción. Esto puede complicarse rápidamente, especialmente si está tratando con ISOs o tiene varios períodos de consolidación diferentes. La clave es mantener buenos registros de sus opciones y consultar con un profesional fiscal cuando sea necesario. Ellos pueden ayudarle a determinar el mejor momento para ejercer sus opciones y cómo minimizar su responsabilidad fiscal.
La Conclusión
Navegar por las implicaciones fiscales de las opciones sobre acciones puede ser confuso, pero es importante entender cómo funcionan y cómo impactarán su situación fiscal general. Mantenga buenos registros, consulte con un profesional fiscal y no tenga miedo de hacer preguntas. Con un poco de conocimiento y alguna orientación experta, puede navegar con confianza por el complejo mundo de las opciones sobre acciones.